DURMIENDO CON SU ENEMIGO: ÁCAROS Y ALERGIA

Autores

Ruperto González Pérez

Doctor en Medicina, Médico Especialista en Alergología. Servicio de Alergología Hospital Universitario de Canarias. Académico Correspondiente

Resumen

Las enfermedades alérgicas constituyen una auténtica epidemia no infecciosa en el siglo XXI. El origen de estas enfermedades se debe a una alteración en la respuesta del sistema inmunológico frente a sustancias que son inocuas para la mayoría de las personas. La OMS ha situado a las enfermedades alérgicas entre las seis más frecuentes del mundo. Se estima que pueden afectar al 20% de la población mundial, resultando más afectados los países desarrollados e industrializados. En nuestro medio, se calcula que una de cada cuatro personas puede padecer algún tipo de trastorno alérgico a lo largo de su vida. Las enfermedades alérgicas constituyen la patología crónica más frecuente en la infancia. El crecimiento en la frecuencia de presentación de la patología alérgica ha sido una constante en las últimas cuatro o cinco décadas, resultando especialmente destacable en aquellos procesos mejor estudiados, como la dermatitis atópica, la rinitis alérgica y el asma bronquial. En la actualidad, la vida en los países industrializados se desarrolla en su mayor parte en el interior de edificios y viviendas. De este estilo de vida occidentalizado se deriva la importancia que han adquirido aquellas sustancias que componen y se vehiculan en el aire respirable de estos espacios cerrados, de manera que su calidad y composición resulta crítica en el desarrollo de las enfermedades alérgicas.